Amada alma, has escuchado hablar que el tiempo puede curarlo todo, hay ausencias que se sienten, no es que el tiempo hace que se borren, solo que él por si mismo te enseña y te muestra desde otro angulo cada una de las distintas perspectivas, ese lapso o intervalo de aprendizaje es particular, por eso no puedes juzgar a nadie porque la evolución de cada alma solo la sabe Dios.
Dios sabe lo que coloca en tu vida para que puedas aprender y es el mismo Padre eterno, quien te ayuda a transitar la experiencia, tu alma necesita de su calidez y de su refugio.
Si en este momento te preguntas hasta cuando vas a seguir cayendo o hasta cuando sigue el tormento, hoy te digo, la respuesta esta en ti, la divinidad te muestra lecciones, aprendizaje a través de lo que vives y lo que vez a otros vivir, para que como los sabios aprendas de cada uno.
Humildad necesita el hombre, el ser humano en el corazón para dejarse guiar, para comprender que los vacíos no se sanan con cosas materiales, con llenar la agenda de tareas, con ocuparse para sentirte importante, los vacíos se sanan cuando ya no escapas, cuando te paras frente a el y recibes lo que te quiere enseñar, ya sea que venga disfrazado de un dolor por un duelo, de una tristeza, de un fracaso o de una confusión ante lo incierto, la respuesta y la solución siempre será buscar a nuestro creador, regresar al inicio, verte con el compromiso de ser cada día mejor, no por lo que digan los otros, no por lo que piensen de ti, sino por cumplir tu misión de vivir cada día siendo feliz, con la conciencia en luz, reconociendo que una parte del amor de Dios habita en ti.
Tu salud mejora cuando te amas, si hoy no te sientes bien, entonces pregunta: estoy cuidando de mi, me estoy prestando atención, me estoy amando como me ama mi creador?
Ámalo todo, si convives con el amor indudablemente, el buscara la forma de llegar a ti y los detalles de cariño no se harán esperar, solo que debes tener presente, que Dios escoge como hacértelos llegar, no le pongas limites.
Ayuda a quien puedas ayudar, no por interés de recibir algo a cambio, sino por la satisfacción de multiplicar lo que Dios te da, bondad, amor, protección.
Quien cree en Dios nada le ha de faltar, todo tiene un orden primero Dios y después todo lo demás, es por ello que primero crees que es posible y luego se concreta.
Dios escribe tu historia y tu le ayudas, entonces conéctate con lo bueno y da lo mejor de ti que en el plan de Dios representa el 50 %.
Y que tu alma diga:
Bendito y alabado sea el Señor mi Dios de día y de noche por todas las generaciones
Ángeles de Dios
