Amada Alma, el cielo nunca descansa, en el momento que tu corazón necesite la asistencia, clama y pide al reino de los cielos y siempre recibirás respuesta, un corazón lleno de bondad será protegido por el reino celestial.
No temas, más, sin embargo, pide siempre protección, los tesoros hay que cuidarlos y tu alma es un hermoso tesoro para el creador.
Todo Hijo de Dios que con valentía avanza lleva en sí la fuerza de nuestro creador, Dios del Universo, la fortaleza de sus ancestros y el amor que el espíritu santo representa.
Concentra tu atención en tu conexión con Dios.
Busca el rostro de Jesús, mira siempre las huellas de amor, las huellas de la esperanza que representa la resurrección, sus huellas de compasión para obrar para el perdón de toda la humanidad.
Necesitas ayuda para mantenerte en el camino de la luz y Dios te ama tanto que ha dispuesto a sus ángeles para que te asistan y te llenen de su amor.
Dedica tiempo a tu relación con el creador y que tu alma diga:
Bendito y alabado es el Señor mi Dios de día y de noche por todas las generaciones
Ángeles de Dios