Amada alma, cree en el propósito que Dios ha escrito para tu vida,
El amor que nuestro Padre celestial siente por cada uno de sus hijos es visible, por eso es tiempo de confiar, para concretar metas y proyectos.
Si tu plan inicio con cambios, deja que el Padre te guie y confía, pues el don de paciencia puede llevarte a culminar y concluir todo lo que te lleve a la evolución.
Alimento del alma, la esperanza es, no la dejes perder.
Bendito y alabado sea el Señor, mi Dios de día y de noche por todas las generaciones.
Ángeles de Dios